Las letras del Tesoro: ¿cómo tributan en la declaración de la renta?
Las letras del Tesoro comenzaron a dar beneficio con la subida de tipos de interés y fueron muchas las personas que apostaron por invertir en ellas. La demanda por este tipo de productos llegó al punto de formar largas colas en las sedes del Banco de España. Y ahora, en plena campaña de la renta del ejercicio 2023, muchas personas se están preguntando cómo tienen que incluir estas inversiones.
¿Cuál es el rendimiento de las letras en la declaración de la renta? ¿Qué fiscalidad tienen estos productos financieros?
El rendimiento generado entre el importe de compra y el de venta o amortización de este producto financiero, independientemente de su plazo, tendrá la consideración de rendimiento del capital mobiliario en el IRPF.
Así, para la declaración de la renta del ejercicio del 2023, se aplica un tipo progresivo, que es del 19% para los primeros 6.000 euros, del 21% entre 6.000 euros y 50.000 euros, del 23% entre 50.000 y 200.000 euros, del 27% entre 200.000 y 300.000 euros y del 28% para todas las rentas que excedan esta última.
Y, ¿cuánto me retienen si he comprado letras del Tesoro? No existe retención a cuenta sobre este rendimiento, cualquiera que sea el perceptor de este.
Si obtenemos un ingreso por las letras del Tesoro, ya sea por vencimiento o por transmisión, lo debemos poner en el modelo 100 de la declaración de la renta. En concreto, en la casilla número 30 del documento.
Y, ¿si no soy residente en España y he comprado letras del Tesoro español? Las personas no residentes no están sometidas a tributar en España los rendimientos que provienen de la Deuda Pública española, siempre que sean obtenidos por personas físicas o entidades no residentes que no operen a través de un establecimiento permanente en España.
Más allá de las letras del tesoro, ¿por qué otras opciones han apostado los inversores conservadores?
El fondo monetario es otra opción que, con la subida de tipos de interés, ha resultado atractiva en el corto plazo para los inversores conservadores. Su gran ventaja es que es un producto líquido que, al ser una institución de inversión colectiva, tiene la obligación de tener una diversificación en los activos que tiene en cartera.
En cuanto a su tributación, también están incluidos en la base del ahorro del IRPF, pero a diferencia de las letras del Tesoro, el fondo monetario tributa como ganancia o pérdida patrimonial, por lo que solo habrá que tributar por ella si vendemos nuestra posición. La gran ventaja fiscal con los fondos monetarios está en que podemos cambiar de un fondo a otro sin tener que pagar impuestos.
*Artículo actualizado el 16/05/2024.