Análisis de actualidad de Josep Prats | Luz al final del túnel
Josep Prats, gestor de Abante European Quality, hace un repaso de lo que ha ocurrido en las últimas semanas como consecuencia de la extensión de la pandemia de COVID-19 y destaca que “la realidad es que la reclusión forzada está contribuyendo a superar la epidemia”, aunque resulta complicado analizar las cifras. En este sentido, Prats señala que los datos que podemos analizar -no los de contagiados- son el número de pacientes hospitalizados, el número de pacientes ingresados en UCI y el número de fallecidos. “Y analizando la evolución de estas tres magnitudes, en Italia y en España, podemos decir que, efectivamente, parece que podemos ya atisbar la luz al final del túnel”, destaca.
Respecto a la evolución de la enfermedad en España, escribe: “Probablemente, y siguiendo el patrón ya anticipado por Italia, la cifra diaria de fallecimientos empiece a estabilizarse la próxima semana y a descender a partir de la siguiente”. Sin embargo, “hasta que no sepamos, con mayor certeza, los plazos y modalidades de levantamiento de la cuarentena será difícil evaluar las consecuencias que, sobre la economía, y sobre los mercados financieros, se derivarán de esta crisis. A corto plazo, sin duda, las caídas de actividad económica, el aumento del paro y el consiguiente aumento del déficit público serán excepcionalmente fuertes. Medidas en datos mensuales, las mayores de la historia. Los mercados financieros lo saben y han reaccionado fuertemente a la baja, aunque en las dos últimas semanas hayan mostrado algunos signos de estabilización”.
Prats señala que “la caída de la economía será muy dura“. “Pero, si la parálisis derivada de la urgencia sanitaria es breve, la recuperación posterior podría ser también muy rápida. La gran incógnita no es otra que la duración de la crisis sanitaria“, añade. Así, indica: “Si hablamos de hasta un máximo de dos meses de gran paralización, como sugiere la vuelta a la actividad de China, seguidos de otros dos meses de cierres limitados a algunas actividades, 2020 sería un año de gran caída de resultados, pero el grueso del tejido productivo previo a la crisis volvería a recuperar la normalidad en el segundo semestre y a finales de año las ventas de la gran mayoría de empresas habrían recuperado niveles mensuales similares a los de 2019”.
“Hay que esperar una paulatina y no muy prolongada en el tiempo (semanas, algún mes, no trimestres) vuelta a la normalidad económica. Tendremos que convivir con malas noticias derivadas de la epidemia durante un tiempo largo, veremos como siguen falleciendo muchas personas cada día. Aunque sean la mitad de la mitad de las que fallecen hoy seguirán siendo muchas. Veremos como, cuando la mayoría de nosotros haya vuelto al trabajo normal, en unas semanas, los médicos y el personal sanitario, a quienes nunca agradeceremos suficientemente su sacrificio, seguirán trabajando en condiciones muy difíciles, muy lejos de la normalidad durante mucho tiempo”, destaca.
Y termina: “Pero cuando las nuevas entradas en los hospitales sean inferiores a las altas de enfermos curados, podremos decir que el peor momento habrá pasado. Y para ello faltan días, quizás alguna semana, pero no meses”.