Claves de una reforma fiscal por debajo de las expectativas de Europa y los inversores
La reforma fiscal detallada hace unos días por el ministro de Hacienda Cristóbal Montoro trae algunas novedades que han resultado muy comentadas. El Anteproyecto de ley, que debe someterse al trámite parlamentario, incluye algunas de las recomendaciones que hizo en marzo el comité de expertos, pero deja de lado muchas otras y evita la subida del IVA que Bruselas considera imprescindible.
Montoro recordó que el objetivo de esta reforma es lograr un sistema impositivo más sencillo y justo que impulse el crecimiento económico y la creación de empleo, mejore la competitividad empresarial, favorezca el ahorro y la inversión y permita la lucha contra el fraude. Cabe destacar que los empresarios han pedido, sin embargo, que se reduzcan las cotizaciones sociales para ayudar al empleo. Y la agencia crediticia Moody’s considera que la reforma propuesta es poco ambiciosa.
Entre los principales cambios que afectan al IRPF destaca la importante rebaja de los tipos de la base general (rentas del trabajo, alquileres, rendimiento de actividades económicas e imputación de rentas inmobiliarias) y la reducción de los tramos de 7 a 5. Ha generado polémica la medida que obliga a pagar impuestos por las indemnizaciones por despido, con un mínimo de 2.000 euros por año trabajado. Por otro lado, las medidas sobre el ahorro son, en general, positivas porque bajan los impuestos. Sin embargo, sorprende el tratamiento que se ha hecho a la inversión para la jubilación, poniendo unos límites que no fomentan que los ciudadanos tomen una conciencia clara de la necesidad de ahorrar más y mejor.
Si quiere leer el análisis detallado que ha realizado Paula Satrústegui, directora de Planificación Financiera de Abante Asesores de las medidas que recoge el Anteproyecto, pinche en el siguiente enlace: Claves de la reforma fiscal.