¿Cuánto cuesta la dependencia?

España es uno de los países más longevos de la OCDE. Según datos de la organización, en 2050, nuestro país será el segundo en el que habrá más personas mayores de 65 años por cada cien habitantes. ¿Qué implicaciones tiene ese escenario?

Tener una población longeva y con más esperanza de vida, no necesariamente quiere decir que goce de buena salud. Las probabilidades de sufrir un problema derivado de la edad como, por ejemplo, la dependencia, aumentan. Por ello, es importante conocer cuál es el coste de la dependencia en caso de que la padezcamos nosotros, un familiar o un ser querido.

El impacto que puede tener una dependencia en nuestro patrimonio puede generar bastante incertidumbre. ¿Podré mantener mi nivel de vida? El cuidado y atención que necesita una persona con dependencia varía en función del grado, se puede padecer una dependencia moderada, severa o gran dependencia. En este sentido, el coste dependerá de las necesidades de la persona en función de la ayuda que necesite. Aun así, existen servicios y prestaciones estatales y autonómicas que pueden ser útiles de para hacer frente a los gastos.

Prestaciones económicas: ¿cómo puedo solicitarlas?

La cuantía se calcula en función del grado de dependencia, el coste del servicio y la capacidad económica de la persona beneficiaria. Si, por ejemplo, desglosamos las ayudas de la Comunidad de Madrid, estas son las cifras:

• Prestaciones económicas vinculadas a un servicio (PEVS): se trata de una ayuda para financiar los gastos del servicio de atención residencial, ya sea diurno o en el domicilio, y es la persona beneficiaria la encargada de elegir el centro privado.

• Prestaciones económicas para cuidados en el entorno familiar (PECEF): modalidad de carácter excepcional, que contribuyen a los gastos de la atención a la persona en situación de dependencia en su domicilio.

• Prestaciones económicas de asistencia personal (PEAP): tiene como fin la financiación del contrato de una asistencia personal profesional.

Servicios de atención: ¿cuáles son?

• Servicio de teleasistencia: permite a los beneficiarios permanecer de manera independiente el mayor tiempo posible en sus hogares.
• Servicio de atención residencial: hay dos tipos. El permanente ofrece una vivienda estable o de forma indefinida a las personas que no pueden ser atendidas en sus domicilios. Por el contrario, el temporal lo que facilita es una estancia temporal, ya sea por vacaciones, convalecencia o para cubrir los periodos de descanso de los cuidadores no profesionales.
• Servicios de ayuda al domicilio: atenciones llevadas a cabo en la vivienda de las personas en situación de dependencia.
• Atención temprana: para niños de entre 0 y 6 años con necesidades especiales transitorias o permanentes por deficiencias o alteraciones en el desarrollo.
• Centros para personas con discapacidad

Según datos del IMSERSO, si calculamos cuál es el coste individual anual de los cuidados de larga duración y cuánto podrían recibir de las prestaciones públicas por dependencia una persona que lo necesitara, el resultado sería de déficit, ya que las ayudas públicas no terminarían de cubrir las necesidades de la persona dependiente.

El caso de María

María tiene una dependencia moderada, es decir, necesita ayuda para algunas de las tareas básicas del día a día y tiene apoyo intermitente para poder lograr su autonomía. Los servicios que tiene son de teleasistencia y ayuda a domicilio de 3 horas al día, por un coste individual de 15.375, 74 euros al año. También ha solicitado la ayuda económica para poder paliar los gastos y ha recibido el máximo, 3.600 euros al año.

Si restamos lo que le cuesta el servicio menos las ayudas que recibe María, tenemos un coste real de 11.775, 34 euros al año.

Entonces, ¿cómo puede María protegerse ante una situación de dependencia? Trazando un Plan de Futuro Completo y poniendo en perspectiva cuáles son sus objetivos y metas, qué quiere conseguir o preservar. Una vez tenga eso definido, podrá pintar los números y evaluar qué vehículos de inversión o de previsión son los más adecuados para ella.

En este sentido, anticiparse es clave. Como explica Jaime Aguilar, socio de Asesoramiento patrimonial en Abante, es importante cuantificar cuáles son nuestras necesidades en caso de aumento de gastos o reducción de ingresos y saber qué tenemos que contratar para cubrirnos de imprevistos.

– ¿Quieres protegerte ante una situación de dependencia?